Oh captain my captain / Boten a Boateng

Gente: Tus papás son alemanes?
Yo: No.
Gente: Aahh, pero naciste en Alemania?
Yo: Tampoco.
Gente: Entonces cuanto tiempo estuviste viviendo en Alemania?
Yo: Eeeem, nunca he ido a Alemania.
Gente: (Ceja levantada generalmente con gesto de desaprobación, como lanzándote la indirecta de que eres una loser wannabe) Entonces... por qué le vas a Alemania ?
Yo del 2007 para atrás: Bueno, es un equipo fuerte, su trayectoria, sus jugadores... bla bla
Yo del 2007 en adelante (Mariana sin autocensura that is): Porque Michael Ballack fits el prototipo de mi hombre perfecto y descubrí que lo amaba desde que empecé a pillarme lo bello que le quedaban esos chores en el 2002.
Gente: Ahhh (Subtexto: Eres una mujer más)

La cuestión es que sinceramente a estas alturas del partido (jaja) no me importa mucho si la razón por la que empezó a gustarme el fútbol alemán fue la más banal del mundo. Lo relevante del asunto es que 8 años después sigo sintiendo la pasión que sentí en ese momento y más fanática fiel y genuina no puedo ser.

Yo le explico a mis amigos que es como cuando te gusta alguien: a primera vista no me vengas a decir que lo que te ¨atrapó¨ de la niña fue su inteligencia y personalidad. La viste, te pareció que estaba buena y cerrada la discusión. Después es que entras en profundidades. Empieza por la atracción y permanece por el amor (Así de cursi intensa me puedo poner con este tema)

Pues así más o menos fue lo mio con mi equipo. Ballack fue la portada, y una vez que me enganché con el libro me di cuenta de todo lo amazing que había dentro de él.

Llevo desde la final Korea-Japón 2002 (en la cual rompí la tradición mi abuelo de irle a Brasil, porque a Venezuela todavía no se puede) calándome chalequeos familiares y de todo tipo. Empezando por la Rancel.

La presión social era peanuts! Sólo me concentraba en el día en que finalmente Alemania ganara el mundial con Ballack de capitán para así gritar, brincar y callarle la boca a todo el mundo. Mi cinta de Alemania que me trajo mi hermano Matías del mundial 2006 seguía guindada en mi cuarto esperando el día en que pudiera sacarla por la ventana del carro. (Hasta hace 2 días estaba amargada porque la dejé en Caracas y no la iba a poder usar en este mundial).

Y justo cuando tenía los horarios, lugares, excusas, ánimos y props preparados para Sudáfrica 2010 viene un desgraciado como Boateng a tumbarle los sueños a una. CDTMQTP!


Kick Split Tear Hate Crash Oh the agony! a lo Steven Berkoff


O sea creo que ni el mismo Ballack, a pesar de haber perdido su último chance de ir y ganar un mundial, se amargó tanto anteayer como yo. El bicho sólo declaró: ¨Bueno, así es el fútbol, estas cosas pasan¨... y yo llorando del otro lado de la laptop: ¨Bien Michael, (sollozo) que bien lo estás tomando (sigh), qué profesional (himno de alemania de fondo, fotos de la copa de protector de pantalla)¨

Cuando lo pienso en frío me doy cuenta sin duda de mi leve (será leve??) desvarío psicológico. Pero I guess que esa enfermedad mental se llama Fanatismo.

Se sufre en serio. QUÉ FRUSTRACIÓÓÓÓÓÓNNNN!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Me consuela no sentirme tan apegada a otro equipo así, pa' no repetir este showcito. No me vuelvo a ilusionar, al menos hasta que Venezuela clasifique al mundial. Veto parejo a todos los demás campeonatos: Eurocopa, Champions, FA Cup... Ni me cuenten que ni quiero saber. De vuelta a ser una niña y ya.

My heart goes out to todos los hombres que sienten, aman y sufren el fútbol, qué valientes hermanos! Que tu humor cambie por un partido de fútbol NO es sano. Qué va!

Ballack: Me quedé con las ganas de verte rompiendo la pava de las últimas 2 finales y la Eurocopa, derrotando a los italianos, celebrando, llevando a tu equipo a la final y aplicando todas tus estrategias. Sobre todo extrañaré buscar el número 13 por toda la pantalla. FML


Tanto nadar pa' morir en la orilla. Qué mala pata

Leyenda: La foto fue sacada de mi carpeta de la derrota en el mundial Alemania 2006. Pensaba cambiarla por una de los jugadores alemanes celebrando en la final, pero llegó la bota de Boateng. Por eso y más, boatenglo!